Catorce años en el poder y muchas promesas sin cumplir, pero hay promesas que solo aparecen en tiempos electorales que han sido planteadas como megaproyectos que nunca se concretaron. Muchos de estos han quedado en el olvido, a medio camino o vuelven a ser sacados bajo la manga por el régimen cuando necesitan convencer a sus bases.
Daniel Ortega y Wang Jing durante la entrega y firma de la concesión para la construcción del gran canal interoceánico el 14 de junio 2013. | Foto: Redacción Abierta.
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Daniel Ortega regresó al poder el 10 de enero de 2007. Desde los primeros meses de su gobierno realizó varias promesas, entre ellas megaproyectos que mejorarían la economía del país.
El equipo Fact- Checking de REDACCIÓN ABIERTA clasifica esto como engañoso. Megaproyectos que solo se anunciaron con bombos y platillos pero al final no se vio ni se ha visto ningún tipo de resultado.
Supremo Sueño de Bolívar
El 20 de julio de 2007, a pocos meses de haber regresado al poder, Daniel Ortega y el entonces presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez Frías colocaron la primera piedra de lo que sería el Complejo Industrial El Supremo Sueño de Bolívar.
El proyecto tenía dos fases, la primera fase era la construcción de una terminal, conocido como patio de tanque, cuya función era permitir la importación de productos limpios tales como la gasolina, el diesel, fuel oil y gas licuado, y esta tendría una capacidad de recepción, almacenamiento y despacho de un millón 80 mil barriles.
La Fase II, la más ambiciosa, constituía la importación del crudo que sería procesado en el centro de refinación con una capacidad de 100 mil barriles diarios y los productos limpios que salieran de este proceso se almacenarían en el patio de tanque para su posterior distribución y de esa manera cubrir la demanda petrolera del país y el excedente colocarlo en el mercado internacional.
La segunda fase incluía también la construcción de un oleoducto para transportar el petróleo desde el Atlántico para su posterior transformación en productos limpios.
Diez años después, lo único que finalizaron fue la primera fase y la segunda fase quedó en espera, a causa de la crisis económica en Venezuela. Esta fase tenía un valor aproximado a 4,165 millones de dólares de inversión, el gobierno tenía pensado buscar financiamiento internacional pero no se supo más sobre el tema. Pero las cifras del Banco Central de Nicaragua indican que apenas Venezuela entre 2008 y el primer semestre del año 2014 había invertido en este proyecto un poco más de 230 millones de dólares.
Cota 100
Daniel Ortega y Rosario Murillo durante la Asamblea Sandinista Nacional en 2016. | Foto tomada de El 19 Digital.
El 20 de mayo de 2016 durante la Asamblea Sandinista Nacional, Daniel Ortega recordó que en el período del 79 al 90 se trabajó el Proyecto de la Cota 100, un proyecto de irrigación a gran escala. También agregó que estos estudios se realizaron cuando no se hablaba del Calentamiento Global, ni cuando había mucha preocupación sobre el agua ni los bosques.
Para el régimen, el proyecto de la Cota 100 sería un proyecto “que tiene que encarnar el Programa de Gobierno del Frente Sandinista para este nuevo período que va del año 2017 al año 2022”, afirmó Ortega a pocos días de inscribir su candidatura para su reelección en el año 2016. Hasta ahora no se ha visto nada sobre este proyecto.
Originalmente este fue un proyecto concebido en 1974 durante los años de gobierno de Anastasio Somoza Debayle. El ingeniero Modesto Armijo, elaboró un estudio de pre-factibilidad que, más tarde, en 1975, presentó como anteproyecto bajo el nombre Beneficios Múltiples de Lagos de Nicaragua.
Sin embargo, en la actualidad, este proyecto no es viable. En los litorales de los Lagos Xolotlán y Cocibolca y en la planicie León-Chinandega existen unas 742.000 hectáreas de tierras aptas para la irrigación (152.000 ha en la zona del Lago Xolotlán, 432.000 ha en el área del Lago Cocibolca y 158.000 distribuidas en el área León-Chinandega). El potencial de agua disponible en la planicie León-Chinandega y los litorales de los lagos es de aproximadamente 745 MMC, capacidad que podría abastecer los requerimientos de agua para el riego de 138.000 ha aproximadamente, por lo que se presenta un déficit de agua para el riego de unas 600.000 ha. Para suplir este déficit se han planteado diferentes alternativas de proyectos, utilizando todas ellas el Lago Cocibolca como fuente de abastecimiento.
El estudio más reciente, “Estrategia de Riego del Pacífico de Nicaragua”, contemplaba represar las aguas del Río San Juan a la altura de San Isidro, mantener la cota del Lago Xolotlán a 32 msnm, trasvasar agua del Lago Cocibolca hacia el Lago Xolotlán a través de la construcción de un canal sobre el Río Tipitapa y bombear el agua disponible hasta la cota 100 msnm para después regar por gravedad las 600,000 ha aptas para riego que están por debajo de esta cota. Este proyecto considera la generación de energía a través del Río Tamarindo, la recuperación del Lago Xolotlán y el abastecimiento de agua potable a ciudades que requieren de este servicio, incluyendo Managua.
Al igual que los proyectos hidroeléctricos, este proyecto modificaría el caudal
medio del Río San Juan, lo que a su vez tendría fuerte incidencia en la navegación del río. Aspectos a considerar con este proyecto deben ser la afectación a la vida acuática relacionada con el Río San Juan, los lagos Cocibolca y Xolotlán, la flora y la fauna existente en el área a inundar por la presa propuesta y los impactos ambientales que se producirían con la construcción de todas las obras complementarias. Con este proyecto de riego está presente el conflicto en el uso del agua, ya que mientras mayor área se riegue, menos disponibilidad habrá para la generación de energía y para el abastecimiento de agua potable.
Sin embargo, Ortega durante aquella Asamblea Sandinista Nacional finalizó: “Es estratégico, es de vida o muerte para nuestro país desarrollar ese programa. Y aquí, hoy, en esta Asamblea Sandinista, desde el gobierno que hoy estamos presidiendo, ya levantamos ese proyecto que vamos a llevar ante nuestro pueblo, pero sobre todo que vamos a convertir en realidad”.
Carretera Costanera
La Costanera es un proyecto que fue planteado por el ingeniero Enrique Bolaños Geyer en su administración presidencial y no tuvo éxito por falta de financiamiento. Ortega desde el inicio de su gobierno retomó este proyecto, lo volvieron a vender como promesa en el año 2017 y en este año 2021 lo mencionan nuevamente en el “Plan de lucha contra la pobreza para el desarrollo humano sostenible 2021- 2026” aduciendo que:
“En el período 2021-2026, el GRUN se propone continuar desarrollando infraestructura de transporte vial, portuaria, aeroportuaria, ferroviaria y pasos fronterizos que integre el territorio nacional. Entre estos Proyectos destacan:
En el Pacífico: la Carretera Costanera desde la frontera con Costa Rica hasta Potosí, en Chinandega, que se construirá por etapas, y el perfil del Ferrocarril Metropolitano en sus dos ramales: Managua–Masaya–Granada y Ciudad Sandino–Managua–Tipitapa”.
En un primer momento, el régimen se propuso construir la carretera desde El Naranjo (frontera con Costa Rica) hasta Masachapa, pero en los últimos años han prometido llevarla hasta Chinandega. Es decir que la vía abarcaría toda la franja del Pacífico del país, significando un total de 170 kilómetros. Hasta ahora no hay avances significativos.
Nicaragua ha invertido desde 2004 al 2019 un total de 176.3 millones de córdobas (US$5.2 millones) en la carretera litoral del Pacífico, conocida como Costanera, sin tener un diseño final y una ruta definitiva.
En el año 2020, el Ministerio de Transporte e Infraestructura (MTI) tenía aprobado 5 millones de córdobas más para la obra. En el Presupuesto General de la República 2020 aparecen reflejados esos nuevos recursos que provienen de las Rentas del Tesoro.
En octubre del 2020, la Asamblea Nacional aprobó el Convenio de Préstamo suscrito entre la República de Nicaragua y el Fondo OPEP para el Desarrollo Internacional para financiar el Proyecto Camino Rural Ochomogo – Las Salinas que será ejecutado por el Ministerio de Transporte e Infraestructura en este año 2021.
El Convenio de Préstamo con la OPEP tiene un monto de 30 millones de dólares, “cuya iniciativa remitida con trámite de urgencia por el presidente de la República Comandante Daniel Ortega, financiará el proyecto de carretera con el fin de impulsar el desarrollo económico de las comunidades localizadas entre Ochomogo y las Salinas, sector altamente agrícola, ganadero, turístico y de pesca” dicta una nota de prensa de la Asamblea Nacional.
Gran Canal Interoceánico
Wang Jing, empresario chino de la empresa Hong Kong Nicaragua Development (HKND), durante la entrega y firma de la concesión para la construcción del gran canal interoceánico el 14 de junio 2013. | Foto: Redacción Abierta.
El megaproyecto insignia del régimen por el cual siempre serán recordados. El 21 de febrero de 2012, Daniel Ortega anunció por primera vez públicamente que iba a reanudar la idea histórica del canal. El 7 de junio de 2013, el gobierno entregó a HKND Group la concesión del canal y el día 13 del mismo mes la Asamblea aprobó su construcción por parte de la firma china.
El Canal de Nicaragua fue un proyecto de canal marítimo de una vía fluvial que conectaría el mar Caribe, en el océano Atlántico con el océano Pacífico. El canal iría por río hasta el Lago Cocibolca y cruzaría el departamento de Rivas para alcanzar el Pacífico. El Canal cubriría un área de 270 kilómetros cuadrados. Ortega había vendido esta idea a la población nicaragüense como una gran oportunidad económica para salir de la pobreza.
Wang Jing, el empresario chino detrás de HKND Group anunció que las obras iniciarían a finales del año 2014 y finalizarían en seis años. Además del canal, HKND había ganado los derechos para construir un ferrocarril, dos puertos, un aeropuerto internacional y un oleoducto.
La construcción del canal tenía un costo estimado de 40,000 millones de dólares. El 22 de diciembre de 2014, el gobierno y miembros de HKND Group, entre ellos Wang Jing, inauguraron las obras del Gran Canal de Nicaragua. Se han cumplido casi siete años desde ese evento y no se desarrolló ninguna obra en la zona.
El 13 de agosto de 2019, Ortega aseguró que “no ha renunciado” al proyecto durante el acto del 39 aniversario de la fundación de la Fuerza Naval.
“Nosotros no hemos renunciado, al contrario tenemos con el pueblo nicaragüense, históricamente, tenemos el compromiso de que se haga una realidad el canal por Nicaragua”, afirmó Ortega.
Este texto está publicado bajo una Licencia Creative Commons Atribución 4.0 Internacional.
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